domingo, 4 de mayo de 2014

Club de Lectura: El lector de cadáveres de Antonio Garrido




El lector de cadáveres es un libro que tenía pendiente de leer desde hace un año más o menos. Le tenía muchas ganas pero por una cosa u otra se me olvidaba que lo tenía pendiente hasta que hablaba con mi amiga Yolanda y me preguntaba: “¿te has leído ya El lector de cadáveres? Te lo tienes que leer, está muy bien. Te va a encantar”.
El libro parecía tenerlo todo para que me encantara: veía aconsejado por una amiga que le encanta leer como a mí y que sabe de mis gustos, las críticas en todos los sitios eran buenísimas y además parecían aunarse en él tres temáticas que me gustan mucho: novela histórica, culturas orientales y misterio. ¡¡Qué más le podía pedir!!
Pues que no defraudara tan altas expectativas, cosa que ….

Y es que aunque El lector de cadáveres comienza muy fuerte con el descubrimiento  por parte del protagonista de un cadáver mutilado en los arrozales de su déspota hermano, asesinato en cuya investigación y resolución se ve involucrado gracias a la intervención de un juez para el que trabajó su padre y que por casualidad pasaba por la aldea cuando se produjeron los hechos.
Tras este prometedor comienzo por desgracia la historia da un giro completo. A partir de entonces Ci, se convierte en el protagonista de una sucesión de calamidades a cada cual más desastrosa y de las cuales sale con vida por pura imaginación y voluntad del autor. Voluntad por la cual tras caer a lo más profundo de los bajos fondos de la sociedad, es rescatado como por arte de birlibirloque para entrar en la Corte Imperial a solucionar una serie de crímenes inexplicables que están teniendo lugar.
Tras esta rápida caída e increíble remontada, la novela se convierte en un capítulo de una mala serie de detectives en la que el protagonista es llevado de un lugar a otro por las circunstancias y sin hacer prácticamente nada se le resuelve el caso sólo en sus propias narices mientras es manejado por el resto de los protagonistas como un pelele sin voluntad ni inteligencia.
Por ningún lado he encontrado eso de que “en la antigua China, sólo los jueces más sagaces alcanzaban el codiciado título de «lectores de cadáveres», una élite de forenses que, aun a riesgo de su propia vida, tenían el mandato de que ningún crimen, por irresoluble que pareciera, quedara impune”.
En fin, una lástima que tan altas expectativas se hayan visto defraudadas por una trama nada creíble. 
¿Habéis leído vosotras El lector de cadáveres?, ¿qué os ha parecido?
Besazos,




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